AL inolvidable e irremplazable Doctor Reneé Favaloro

Hoy todos los argentinos
Recién tomamos conciencia,
Que se nos fue un Gran Hombre
Y un paladín de la ciencia.

Que tuvo como premisa
¡El paciente está primero!
La vida es lo importante
Por encima del dinero

Y cuando fue famoso
Una eminencia mundial,
No olvidó sus comienzos
De humilde médico rural.

Si habrá andado los caminos
Esos caminos pampeanos,
Llevando en su maletín
El alivio a los paisanos.

En Cleveland por diez años
Perfeccionó su experiencia,
Y después volvió al pais
El amaba la docencia.

Su sueño y su gran meta
Donde puso su corazón,
Fue sentar las bases
Y crear su Fundación

Y se lo vió sin descanso
Muy de noche ó bien temprano,
Gastando mil bisturís
Allá,en la calle Belgrano.


Hombre de una palabra
Amante de la verdad,
Hasta sufrió un escrache
Por mostrar la realidad.

Y como siempre ha pasado
Costumbre de argentino,
Todo el mundo lo admiraba
Aquí era sólo un vecino.

Un señor que fue un ejemplo
Que afuera era consultado,
Aquí sufría y penaba
Por las deudas del Estado.

Hemos perdido a un grande
Que dejó como legado,
A idóneos profesionales
Que aprendieron a su lado.

Y como una paradoja
Vos,a quien tanto salvastes
Para reunirte con Dios
Tu corazón lastimastes.

Siempre estarás con nosotros
Y lo confirma un hecho,
Muchos seguirán viviendo
Con un by-pass en su pecho.

Abel Oscar Romano
29/08/2000